domingo, 5 de mayo de 2024

EN EL TRASCACHO

Me fui al trascacho a tomar aliento

y al regreso todo era silencio.

Mi cuenta vacía como mi lecho,

como la casa en la que resuenan los pétalos

que caen secos al suelo.

Porque en una casa vacía cualquier roce

se convierte en estruendo.


Me fui al trascacho a abrigarme de versos

y regresé con un manojo de letras mustias,

tan enmarañadas que ni yo entiendo,

con el mismo dolor en el pecho,

con la misma falta de aliento. 


Y regresé al trascacho,

desando únicamente desaparecer.

Deshacerme como las nubes 

cambiantes con el viento.

Como el humo de la hoguera 

en el patio de un pueblo.

Sabedora de que si nada tengo, nada dejo.

Que si nada quiero, nada anhelo.


Me fui al trascacho

y regresé sin flores ni color,

sin ira y sin rencor,

pero con el mismo desapego

anclado al pecho. 


miércoles, 24 de abril de 2024

DESTILACIÓN...

…de líquidos mediante un proceso de evaporación por calentamiento
y posterior condensación por enfriamiento.

Ahora, que gota a gota me destilo,

que verso a verso “alambiqueo”,

recorro la alquitara de los días.


Ahora que irremediablemente

tengo que llegar a verterme

porque no puede haber freno. 


Ahora, que el rampojo inservible

se convierte en algo nuevo,

me desvisto de los hollejos.


Ahora que  lo único que queda 

es esperar el enfriamiento

y su condensación. 


Y tras un tiempo de reposo

pasar el trago

de este áspero orujo,

asesino de madrugadas,

creador de sueños.

Recio, sin condimentos.


viernes, 12 de abril de 2024

MARIONETA

Pendo de un hilo,
pero no sé de cual.

Como marioneta sin más ambiciones
no tengo claro qué hilo es 
el que mueve mis piernas, brazos o mi cabeza.

Tampoco tengo claro
si es desde una única cruceta
que se maneja todo este amasijo de madera.

Ignoro también si es el de la cabeza,
la espalda, los hombros, manos o piernas
el hilo de poliéster que me mantiene en pie. 

A día de hoy, lo único que sé
es que pendo de un hilo
para seguir articulada 
en este escenario de cartón.





miércoles, 13 de marzo de 2024

DECENIOS


“Cada decenio parece ser que me vuelvo insoportable”

Es que no soy yo
es una bruja malvada
que hiere, ataca
que hurga hasta la arcada.

El espejo mágico
que tienes enfrente,
sólo refleja
arrugas, gorduras,
ojeras y canas
porque el resto
es 
un
alma
inerte
pausada en lágrimas. 

Cada decenio 
se alinean los astros,
y el espejo se muestra de frente.
Aquel que te amaba 
ya no te quiere,
vio tu reflejo:
no fuiste valiente. 


Caminas en círculos,
piensas en bucle,
escribes en órbitas,
resoplas en pozos.

No existen brocales, 
raídas las sogas, 
calderos sin asas,
sin muros de roca. 

En el espejo de agua
no hay escapatoria. 

domingo, 3 de marzo de 2024

LA GATA SIN TEJADO

 Y el tejado se derrumbó

sin posibilidad de escape,

ni de decir adiós si quiera.


Claramente, 

necesitaba una inversión en reparaciones,

que por falta de te quieros y tiempo 

se fueron dejando para otro momento.


Fui experta

en la estratégica colocación de cubos y calderos

en las noches de tormenta,

en la técnica de dos pares de mantas para evitar

el roce del viento gélido,

en la radio y la tele encendidas 

para esquivar el crujir del techo.  


Pero, aún así,

se hizo invierno en mi cuarto.

Se helaron las sábanas 

y el edredón no abrigaba,

y en cada siseo que llegaba de fuera

se escarchó la almohada y el alma. 


Y el tejado se derrumbó

(afortunadamente, cuando estaba fuera)

La casa coraza se volvió un amasijo

con todo lo que la habitaba. 


Ahora entre escombros camina la gata 

intentando encontrar entre las tejas

aquello que la hacía sobrevivir,

escarbando el polvo,

deslizándose entre las vigas,

husmeando algo de comida,

pues se ha olvidado

cómo era eso de sobrevivir en la calle.


martes, 20 de febrero de 2024

OTRA VEZ CON ECUACIONES

 El problema no eres tú,

pero yo soy incapaz 

de resolver la ecuación.

Ignoro la incógnita.


Las equis, i griegas y paréntesis 

se me amontonan

como la ropa sin planchar

encima de la mesa. 


Siempre resolviendo nada.

Avasallada por horas

que se vuelven difusas

según avanza el día.

Obligándome a dejar la mente

en “ruta planificada automáticamente”. 

Si no lo piensas no existe.


Y cómo hacer entender 

que las matemáticas 

nunca fueron mi fuerte,

que jamás se me dio bien

pensar analíticamente.

¡Dejadme en paz!

estoy tratando de resolver incógnitas.

Necesito silencio.

(Y una calculadora de tristezas)  


miércoles, 17 de enero de 2024

INGRÁVIDO: FUERZA CERO


A bocanadas 

tragando un aire

que no te sirve

para seguir latiendo.

Manos ajadas de invierno


A silencios 

me enjaulé 

en tus dedos.

Hoy me vuelvo etéreo


A mordiscos late el sexo

caída libre sin alcanzar el suelo.


Sólo oyes tu respiración,

te arrolla el corazón,

sin ilusión, 

sin pasión, 

sin razón,

sin amor.

Y en caída libre

sintiendo nada. 

porque nada hay al fondo.

¡Levanta la mirada!


Los brazos no sostienen

ni aferran al suelo.



Ingrávido,

sin saber si caigo o me sostengo.

Etéreo

Fuerza cero.