jueves, 5 de julio de 2012

CADENCIA INNATA

Y mientras a fuego lento se cocinan los pensamientos, los sentimientos... hoy me rondan unos viejos versos...
foto de Eduardo Sanz
Una cosa es la cadencia
natural del alma y
otra muy distinta el cauce
por el que intentamos llevarla.
Algo inútil, porque
siempre termina llegando esa
riada de sentimientos
que hacen que nos desbordemos
y el alma regrese a su camino innato.
Algunos días, en tardes de niebla,
el alma pugna por regresar
a su sendero; dejando secos
los trabajosos canales
que yo, con tanto esfuerzo,
la había construido
para ser más feliz, más dichosa,
en definitiva, mejor persona.
(noviembre, 2006)


Y ahora, yo me pregunto: ¿vale la pena entonces tanto esfuerzo? ¿tanto trabajo?
No lo sé, y ni siquiera sé si debería molestarme en saberlo.