miércoles, 15 de junio de 2022

Ahí seguís



Si tras el recodo de los días solitarios

se quedaron agazapadas tus sonrisas

será que no te arrebataron del todo.

Si por entre los cajones desordenados

se quedaron tus refranes enredados

será que no te silenciaron del todo.

Si en los marcos de las puertas

se quedaron tus abrazos de bienvenida

será que no te llevaron del todo.


Si (por mis dedos) se quedaron,

será que calaron del todo.

Solitarias sonrisas

Desordenados refranes

Puertas de bienvenida

que todo lo transformaron y ahora se disipan,

el viento los arrastra por los campos

por las lomas y pesqueras,

por los meandros resecos rebotan.

Levantan los cantos en cada pisada

con una polvareda de añoranzas

y se cuela la tierra en los zapatos

para recordar que aún hay algo que manca.

lunes, 28 de febrero de 2022

Trasteo

 



Una tarde,
mientras ellos hablaban de guitarras,
en torno a la barra del Universonoro…

" trastea, tiene el alma rota" 
dijo alguien.





Trasteo, seguramente, dicen los expertos,
porque se me haya roto el alma.
Y también dicen
que hay quienes lo repararan.

Pero como en todo arreglo,
tienta la suerte
girarse hacia desechar lo viejo,
o tornar sin reparo madera y cuerdas en algo nuevo.

Trasteo, desentono...
Alboroto y enervo...
Todo ello con el alma rota
(dicen).
Vociferando sonatas al otoño,
tragando saliva en los mediodías nublados,
hilando versos en bares abarrotados.

Una vez fui especial,
con voz propia, con sonido ronco,
fuera de lo establecido,
de lo normal.
Pero es que resulta que tenía el alma rota,
eso dijeron los expertos.
Y desde entonces, nada sirvió.
Sin más punto ni más final.
Arrebujo las cuerdas tensas.




jueves, 27 de enero de 2022

Creo



Te me escapas entre los dedos,

escurriéndote de mis manos ásperas y frías.

Y pienso dentro de mí:

resiste, creo en el milagro.

El hilo es fino,

pero no frágil,

sé que aún puede sujetar tu mundo

hasta el milagro.

domingo, 2 de enero de 2022

A medio gas



He vivido a medio gas,

sin respirar a penas,

para no romper la burbuja

que nos mantenía a salvo.



Sin grandes resuellos aunque faltase el aire,

sin lágrimas que pudieran deshacer sus frágiles paredes,

sin palabras que tambaleasen el sutil equilibrio

de la burbuja etérea del aquí y el ahora.



Digo: he vivido,

pero no me lo creo,

siento más bien que he sobrevivido,

a bocanadas,

a golpes “de ansiedad y de agonía”,

pasando de puntillas,

casi sobrevolando los días,

esquivando las horas,

anudando las emociones,

creando zancadillas a los versos

que alto y claro

querían escaparse por las rendijas de los dedos.



Digo: he vivido,

pero no lo he hecho,

siento más bien que he malvivido,

bebiéndome la vida a litros, en vez de sorbos,

presa de futuros posibles

y situaciones por suceder.

Previendo futuros inciertos,

protocolos ejecutables,

reducción de riesgos

jornadas interminables.

El arrebato se esfumó,

se disipó en las horas y segundos del día

que amanecía pero no.



He vivido,

como pude,

como supe,

como me dejaron.

Sin tiempo para abrir otras puertas,

sin posibilidad de atisbar las tormentas,

sin opciones para franquear batallas.



Ya está. Cuando no se sabe frenar:

Punto final.

“He vivido a medio gas...

...sin opciones para franquear batallas.

32-12-2021