jueves, 7 de septiembre de 2023

CANTOS ENJAULADOS

Reposan las piedras sobre un lecho de rosas
en una jaula que nuca fue sólo ornamental.
Cuidadosamente colocadas en su mejor cara
sobre los amelados pétalos secos.

Sin más,
nos encontramos en el caminar
y vinieron conmigo.

Ahora no habitan en la tierra
sino abrigadas por hojas
en una jaula poemario.

Rejas que encierran poemas tajantes,
para no volarme,
para no valerme,
para no violarme,
que se inundan de olor a miel,
y colores de otoños punzantes.

Barrotes que fingidamente
parecen retener lo intangible
en la metáfora del verso a verso.



Por más piedras que recojas del camino
y que poses sobre una cuna de pétalos,
por más que la jaula se engalane
con rosas trenzadas en sus rejas,
por más letras que aprisiones
en cárceles primorosas…
las flores seguirán estando muertas,
las piedras golpearán el paso
y los versos te seguirán justificando
para no volarte,
para no valerte,
para no violarte,
para no vulnerarte,
para no abusarte,
para no ahogarte,
para no matarte.